Llegué esta mañana de Tallinn a Estocolmo y debo decir que la ciudad me ha encantado, a pesar de estar invadida de turistas italianos y españoles.
Me he pateado la ciudad de arriba a abajo, me he subido en todas las torres que he podido, he almorzado en un restaurante de cocina del medievo, he mandado postales y bebido Saku, la cerveza local, en la terraza de un bar griego.
Me ha maravillado el buen estado de conservación del centro histórico de una ciudad que fue bombardeada por alemanes y rusos durante la segunda guerra mundial y que fue ocupada por la URSS durante más de 50 años.
Me ha maravillado el buen estado de conservación del centro histórico de una ciudad que fue bombardeada por alemanes y rusos durante la segunda guerra mundial y que fue ocupada por la URSS durante más de 50 años.
3 comentarios:
Brillante, no esperaba menos.
Me la llevé y a tí con ella.
¿Mandeeeee?
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