
Mientras tanto, pasadlo bien.

Creo que me interno en el verano de mi vida. La piel ya no es tan tersa, se agrieta. Se multiplican las manchas por mi dermis, los errores celulares, erosiones palpitantes, una y otra, y otra más.




Separados por océanos de presupuestos y estructuras industriales; unidos por el mutuo amor al cine. El próximo 23 de junio, los contrayentes sellarán su compromiso durante la ceremonia de inauguración de la sexta edición del Festivalito, que ha preparado un completo programa de bodas para la ocasión: secciones oficiales, retrospectivas itinerantes, muestras informativas, talleres, mesas redondas , proyecciones especiales y el singular taller-concurso-campamento de creación audiovisual La Palma Rueda.
¡Uníos a la celebración! ¡Uníos al Festivalito de La Palma! ¡Uníos a la Revolución!
Así que, encantado y honrado por la invitación del Festivalito para ser miembro del jurado, si todo se confirma y los ángeles del apocalipsis no revientan el mundo antes, estaré allí del 23 al 30 de junio.

Paso las noches pegajosas viendo ER, o lo que es lo mismo, Urgencias. En concreto la séptima temporada. En esta, todos son el pupas. Embarazos, madres con trastorno bipolar, tumores cerebrales malignos, sobrinos tiroteados... Hasta a Kovac, que es un buenazo, se le va la pinza y se carga a un atracador a base de practicarle una lobotomía posterior vía bordillo de la calle. Una pena, vamos. Solo he visto el primer DVD (dos caras) y ya estoy de los niervos, sí, sí, los niervos.. Por favor, ¡que se salve el Doctor Greene, es mi heroe!
Hace mucho calor y lo soporto más bien poco. En menos de dos semanas me voy a Marruecos, y será peor. Más caliente y pegajoso. Prefiero el frío. Siempre te puede poner más ropa encima. Pero cuando aprieta la calima...¿Qué haces? ¿Despellejarte?
Hoy he estado husmeando en Sevilla, el el polígono industrial de cuyo nombre no me acuerdo donde tienen su sede multitud de productoras, entre ellas Maestranza Films. Había un casting para una película de la empresa de Julio Medem que, al parecer trata la vida de Pablo Pineda, un síndrome de Down malagueño de 30 años, diplomado en Magisterio y que está terminando la carrera de Psicopedagogía. Toma jeroma. Esperemos que la película sea digna y muestre el ejemplo de superación y a seguir para tantos que supone la historia de este joven que nunca ha tirado la toalla.
Conozco a un hada amazónica que habita y se deleita en lo profundo de la selva. A veces deja que su risa le haga el coro a los pájaros de arco iris, o monta en una travesura a un colibrí para probar la miel de las abejas en las alturas. Luego le gusta lanzarse desde su lomo y deslizarse en las corrientes de aire en una hoja de Victoria Regia. Le encanta mojarse la melena en las secretas calas cristalinas e ir dejando un reguero de gotas brillante por donde pasa, un surco de alegría.
Ser Robbie Williams tiene que molar cantidad, ir de macho alfa tatuado, que las fans descerebradas se te tiren encima y que te empitonen con sus turgentes pechos, que te rocen las mejillas con sus adolescentes pezones al tiempo que nos suplican que las poseamos cual lumis en cualquier lujuriosa esquina olor a pis...o en el Hilton 5*, a ver si puden pillar ADN para hacerse un bombo.
Otra serie que me trago por las noches es Dexter. Este es el nombre del peculiar protagonista, un tipo que trabaja para la policía como forense en la dinámica hemoglobínica, es decir, el estudio de la sangre. Dexter Morgan, interpretado por Michael C. Hall, es además, en sus ratos libres, un psycho-killer, un asesino al que su padre, poli, entrenó para canalizar su ansia para hacer el bien. Hacer el bien, matando a los que hace el mal. Es decir, Dexter investiga y se carga en plan disfrutón a violadores, pederastas, traficantes, asesinos, etc, etc de los que consiguen irse de chiripa y salir sin cargos de los juicios. ¡Farruquito, Pantoja, temblad, que Dexter se lo pasa pipa! Ambientada en Miami, hace gracia ver a un yanki chapurreando spanglish y a un puertorriqueño hablando español como el rubio de los Morancos.
Me he dado cuenta de que trato de llenar todos los espacios de mi existencia. El vacío me da pánico y ha sido seguramente el temido horizonte que me ha hecho evitar tantas cosas que, para otras personas, pueden ser de lo más cotidiano.Dirigido por Thomas Grube junto al español Enrique Sánchez Lansch, el documental "¡Esto es Ritmo!", sigue de cerca y a lo largo del todo el proceso, un proyecto educativo lanzado por la Filarmónica de Berlín.
El nuevo director de la prestigiosa orquesta, Simon Rattle (ver foto), ideó este proyecto dirigido a jóvenes estudiantes de los barrios periféricos de Berlín y totalmente ajenos a la música clásica para que, bajo las órdenes del prestigioso coreógrafo británico Royston Maldoom, y tras varias semanas de intensivos ensayos, compusiesen una coreografía de "La Consagración de la Primavera" de Igor Stravinsky, para llevarla al escenario. Todo este proceso de más de un mes de duración es lo que recogen las cámaras que rodaron este entretenido y edificante trabajo.
El documental nos viene a decir, muy bien contado, que la música es un lenguaje universal que puede reunir en un esfuerzo común a individuos (250 "bailarines") de todas las extracciones sociales, raciales y religiosas y de los tres sexos.
Muy bien. A ver si algún director iraní, afgano o sirio hace uno parecido en su país, y que cunda el ejemplo.
Sòlo cuando me duele el alma de infelicidad, mi corazòn se pone a latir. El suspiro es el marco ideal de la respiraciòn y la felicidad no es la temperatura de la vida.
Cioràn.
A veces, como dice mi amigo Alberto, lo que sucede, conviene. Ayer un ron cola me rebotó espiritualmente, llevándome a un estado chamánico en el que era invulnerable. Sucedió en el Castillo de Gibralfaro, donde se celebraba una entrega de premios para modernos con mini-miting incluido. Esta vez, del Alcalde de Málaga.
Ella estaba allí. Había acudido a la llamada del bufón. Me acerqué con ánimo romántico y le dije lo que pensaba. Solo me callé cuando cruzó los brazos, pero luego continué. Me dijo que estaba incómoda. En un arranque de mal gusto, ante su nueva negativa, le solté un "tú te lo pierdes, nena" y luego busqué un espejo, pero no había. ¿Era yo el que había soltado tal imbecilidad?
La pobre todavía tuvo el buen corazón de acercarnos al centro a mí y a unos amigos. Continuamos la farra un poco más. Me sentía envejecer con la visión de cada nueva jovencita de andares insolentes, de caderas cadenciosas. Ella le había prestado atención a un tipo recién llegado de Oriente Medio. ¿Era eso lo que me faltaba? ¿El elemento exótico?
Hannah Harper es una ctriz británica nacida en 1982 de finos rasgos y una delicada belleza. La vi por primera vez en la película Un Tipo con Suerte, de Bud Lee. Me pareció todo un hallazgo de mujer y desde entonces procuro seguirla en aquellas producciones que tienen la suerte de contar con ella. Bueno, no me extiendo más. Simplemente quería contrarestar los daños cerebrales que puede producir la exposición a mi foto de moderno durante más de veinte segundos.
Ayer fui a ver, tan solo cuatro días después de mi laser-terapia (¡para qué han quedado los Jedi!) la tercera parte de la saga de Spiderman. Esta se podía haber llamado perfectamente Spiderman: La Villanos también lloran, Spiderman Mortal Combat o Spiderman- Packman, que el arácnido acróbata parecía un comecocos, y nunca mejor dicho.
Sí, en el post anterior hacía cien entradas en mi humilde blog. Y seré breve, que hace dos días me retocaron los ojos (uisss, como sssuena essso) con el láser. Se supone que voy a ver todavía mejor después de esta segunda operación, pero no me puedo pasar con la mirada fija en un punto mucho tiempo. Con lo que me gusta mi obligo.Espacio dedicado al hedonismo y a la vida surrealista de JAIME NOGUERA; ... buen cine, buenos libros, buena comida, buenos momentos, aunque breves ... mmmm