domingo, 30 de diciembre de 2007

ONCE. Cuando el amor no es suficiente.

Esta tarde noche he visto una película que me ha roto. Me imagino que mi estado anímico ha ayudado mucho, pero creo sinceramente que Once es una película maravillosamente conmovedora y triste. Musical inusual, muestra de lo mejor del cine irlandés, dirigida el año pasado por John Carney y protagonizada Glen Hansard y Markéta Irglová, llena de sensibilidad y poesía, alejada de pretensiones y artificios y con un toque documental.

La historia es una de amor imposible entre un brillante músico callejero con el corazón roto por una antigua relación y una inmigrante checa, vendedora ambulante de rosas que toca el piano de forma excelente. Ambos inician una relación de amistad en la que intercambian sus historias sentimentales fallidas, apoyándose mutuamente, y una colaboración artística que les llevará a grabar una maqueta llena de preciosas canciones.

Al terminar la película no he podido evitar sentir un desgarro en mi interior. Algo que supongo llevaba sintiendo todo el día, sin saber, o sabiendo, muy bien qué era.

Desde luego, pasa a formar parte de mis películas favoritas desde ahora mismo.

No os podeis permitir el no escuchar esta canción de la banda sonora titulada Falling Slowly (Cayendo despacio):

http://www.youtube.com/watch?v=CoSL_qayMCc

3 comentarios:

Jaime Noguera dijo...

Yo mismo me lo hago. Los protagonistas de la película empezaron a salir juntos al finalizar el rodaje y ahora son pareja. El es 18 años mayor que ella. Ella tiene 19 años.

Algunas veces es posible.

Niri dijo...

Jo que canción más bonita :'(
El irlandés este me parece igual que damien rice, con la voz de la tía y todo.
No será muy moñas esta peli? xD
Ya me la huelo... una llorera del quince... habrá que verla sin estar en esos días.. :P
Me la bajo ^^

Jaime Noguera dijo...

Muy moñas? Jajaja. No se que decirte. Yo lloré, pero creo que por las circunstancias y la "identificación" con el personaje masculino.